¿Qué es la robótica?
La Robótica es una rama multidisciplinar de la ingeniería que diseña, construye, opera y utiliza robots para llevar a cabo diferentes tareas, mejorando el rendimiento y disminuyendo el error humano. Permite la realización de tareas de forma más rápida y efectiva, protegiendo también a las personas de posibles riesgos laborales. En campos como la medicina, permite ofrecer un cuidado automatizado a los pacientes, con el detalle necesario para poder mejorar sus condiciones y calidad de vida, así como asistir a los doctores en el desarrollo de operaciones. Aplicado a procedimientos quirúrgicos, tiene la posibilidad de servir de asistencia directa a doctores o, incluso, realizar operaciones de forma completamente autónoma. Para poder ser realmente útiles en el quirófano, los robots tendrán que formar parte regular del procedimiento y no suponer en ningún caso una complicación adicional, siendo importante el nivel de detalle aplicado en ellos para que mejoren los procesos de operación. Esto la convierte en una opción muy interesante para aquellos que quieran dedicarse al mundo de la medicina pero no sepan qué estudiar o en qué trabajar.
¿Qué hace este profesional?
El Experto en Intervención Quirúrgica a través de Robótica es el profesional médico experto en realizar intervenciones quirúrgicas en cuerpos humanos con la ayuda de la robótica. Se trata de un experto en medicina quirúrgica, para tener la visión global de la intervención así como el liderazgo en los procesos de quirófano. También es necesario que tenga profundos conocimientos de los robots quirúrgicos, para dominar todas las diferentes técnicas existentes.
¿Por qué sabemos que tiene futuro este trabajo?
La Robótica permite la agilización de tareas comúnmente llevadas a cabo por profesionales. Según Tractica, el mercado de la robótica para uso médico alcanzará prácticamente los 3.000 millones de dólares. En el caso por ejemplo de la asistencia en procedimientos quirúrgicos, mejoran el rendimiento general de las operaciones y disminuyen el error en la toma de decisiones, pudiendo reaccionar más rápido que un humano ante posibles imprevistos. La idea de estos robots es que puedan ofrecer un valor añadido al médico sin interferir en el procedimiento, por lo que la personalización jugará un papel muy grande en la implantación de este tipo de robots. Proyectos como el robot Sistema Quirúrgico Da Vinci han resultado exitosos porque el nivel de detalle que le aporta al médico es superior a lo que sus capacidades o experiencias le permiten, con más de 4.000 unidades instaladas a nivel mundial. Otro ejemplo es el robot MUSA, desarrollado por la empresa holandesa Microsure. Este robot ya ha ayudado a cirujanos durante cirugías microscópicas.
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