Cartas de roles: Los roles representan el propósito profesional y, en el futuro, sustituirán a los puestos de trabajo de toda la vida. Las familias aprenden roles como el innovador, que impulsa nuevas ideas y soluciones, o el hacker, que entiende cómo proteger los sistemas. Por ejemplo, cuando alguien juega el rol de innovador puede transformar un trabajo creado por otro jugador para hacerlo más avanzado o adaptarlo a un nuevo reto, convirtiendo la creatividad y el cambio en decisiones claras y muy divertidas dentro de la partida.

Cartas de habilidades: Las habilidades son la moneda del juego y representan las competencias más demandadas, el nuevo oro de los Trabajos del Futuro. Cada vez que los jugadores usan habilidades para crear o mejorar un trabajo, entienden de forma muy clara que saber adaptarse, pensar, comunicar o colaborar es lo que realmente permite avanzar en la partida y en la vida.

Cartas de eventos: Los eventos representan los cambios que sacuden el mundo y al igual que alteran las las reglas de la vida real, también alteran las de la partida. Los jugadores aprenden que los retos y dilemas que plantean estos cambios obligan a adaptar o crear nuevos Trabajos del Futuro, afectando a todos por igual.

Cartas de tecnologías: Las tecnologías representan la causa de los grandes cambios en las profesiones y en la forma de trabajar. En las cartas se explican de manera sencilla y divertida para que los jugadores entiendan por qué el mundo laboral está cambiando y aprendan a ver la tecnología como una aliada.

Cartas de sectores: Representan los ámbitos donde se desarrolla el trabajo y la actividad económica, explicados de forma clara y cercana para que los jugadores entiendan qué hace cada sector, cómo está cambiando y dónde pueden surgir nuevas oportunidades.